Consideramos que la competencia digital en el aula de idiomas ha de trabajarse teniendo en cuenta la manera de relacionarnos con la información y con el conocimiento, de comunicarnos en la sociedad actual. Ha de incluir, por tanto, el tratamiento de cuestiones sociales y cívicas, en ocasiones olvidadas o relegadas a un segundo plano en el tratamiento de las TIC en la enseñanza de lenguas. Se trata de un enfoque que tiene en cuenta los siguientes ámbitos de acción: saber ser, saber hacer y especialmente, saber aprender.
El siguiente gráfico ilustra este enfoque de la competencia digital en la enseñanza y aprendizaje de idiomas, estructurado en cuatro dimensiones interrelacionadas, cada una perteneciente a uno de los saberes mencionados. El gráfico relaciona la competencia digital en el aula de ELE con los objetivos principales de los Entornos Personales de Aprendizaje (PLE) y se divide en el desarrollo de cuatro dimensiones:
- Instrumental: se centra en el desarrollo de habilidades tecnológicas y el desempeño del alumno en el manejo de lenguajes, herramientas y entornos digitales.
- Sociopragmática: esta dimensión cubre el desarrollo de habilidades de búsqueda, gestión y consumo crítico de información, así como la capacidad de producción de información nueva a partir de la ya consumida.
- Cívica: en esta dimensión encontramos la gestión de la identidad digital y responsabilidad con la información, que incluye el conocimiento de deberes y responsabilidades éticas y legales con la información.
- Aprender a aprender: por último, esta dimensión de la Competencia Digital incluye las estrategias de aprendizaje, autonomía y aprendizaje para toda la vida.
Bibliografía y referencias
Torres, Lola. (2011). Aprender a aprender. En Congreso Educa.